Tengo que taparme los oídos y consagrarme a la furia.
Consagrarme a la furia silenciosa o sorda.
Furia sorda, no entiende nada,
Ya nadie le habla y no lee los labios.
La furia va al cine, consagrada a mí
Y nunca comprende la película,
Ella solo lee libros.
Porque eso sí, ciega no es.
Ayer cerrando la boca leyó a Pedro Juan Gutierrez,
Leyó a Fernando Vallejo y a Clarice Lispector,
Y yo, consagrada le dije:
Furia, Pedro Juan recogía latas.
Por su parte, la furia prefiere a Clarice.
Aunque Vallejo le incite a ponerse audífonos.
Yo dormí con ella a las dos de la mañana.
Me consagré a la furia sobre mi almohada.
2 comentarios:
furianámbula_descomulgada
La furia simplemente surge y ¿qué se puede hacer con ella?
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